La piedra

La piel de la catedral

La piel de la catedral de Burgos es especial. El revestimiento pétreo de caliza, extraído de las proximidades de Burgos, en la cantera de Hontoria, le da un color muy característico, mientras ha permitido que su estructura y su belleza se mantengan hasta nuestros días.

La llegada del gótico a las catedrales supone comenzar a dar importancia a la luz. Los muros suben hacia el cielo, las paredes se abren con vidrieras de colores y la luminosidad de la piedra comienza a ser más importante que nunca. Gabriel García Agudo, uno de los responsables de Patrimonio de la Luz, responsables de la gestión de las canteras en la actualidad, nos acerca a lo que supuso extraer la piedra de la roca viva con herramientas artesanales. Para conocer las técnicas de extracción y labrado recurrimos a José Javier Barrio, restaurador y tallista, que nos enseña los secretos de la talla, tanto para los sillares como para los elementos decorativos.

La piedra blanca de Hontoria otorga un brillo muy especial a la basílica, tanto en el exterior como en su interior. René Payo y José Matesanz, profesores de la Universidad de Burgos, nos señalan sus características: una piedra maleable, que gana en resistencia con el paso del tiempo. Sin embargo, toda piedra necesita mantenimiento y restauración. Los trabajos en la catedral, como señala José Javier Barrio, son constantes y se realizan con métodos artesanales para respetar al máximo el espíritu y la estética de la catedral.

Quizá la actuación más visible haya sido, precisamente, la realizada sobre la fachada de la seo burgalesa. La limpieza del exterior volvió a mostrar el color blanco de sus paredes, dejando atrás el gris que durante tanto tiempo habíamos conocido. No solo se realizó la limpieza, sino que se aplicaron técnicas de conservación que, sin alterar su aspecto, protegen la piel de la basílica.

Los cambios no fueron solo estéticos. La piedra supone el principal elemento estructural de toda la catedral y su cuidado debe ser constante. Aplicar los conocimientos de física, química, ingeniería y arquitectura resulta fundamental para protegerla de la oxidación, de gelifracción (la ruptura por el hielo), la contaminación… La Catedral de Burgos goza de una excelente salud tras las restauraciones llevadas a cabo los últimos años, pero los cuidados deben ser constantes y delicados para mantener su magnífico aspecto y la firmeza que ha mantenido durante sus 800 años de historia.              

La serie

Capítulo I: LA ARQUITECTURA

De los cimientos a las agujas

Capítulo III: LAS MATEMÁTICAS

Geometrías sagradas

Capítulo IV: LA PINTURA

Pigmentos desvelados

Capítulo V: LAS VIDRIERAS

Los colores de la luz

Capítulo VI: LA MÚSICA

Sonidos en armonía

Capítulo VII: LAS TECNOLOGÍAS MODERNAS

Mecanismos y sistemas eléctricos

Capítulo VII: LA CONSERVACIÓN

Presente y futuro de la catedral